viernes, 14 de marzo de 2025

GUP: Carolus rex, el impero de acero C10

En el claro designado, las dos fuerzas se alinearon frente a frente, creando un ambiente cargado de tensión y respeto mutuo. Los comandantes y sus respectivas tripulaciones intercambiaron saludos formales, conscientes de la magnitud del enfrentamiento que estaba por comenzar.

Extiendo mi mano ante Kebiko para dar el saludo de amistad entre academias amigas.

Erik: Peleemos bien, hermana

Kebiko observó la mano extendida de Erik por un breve momento antes de esbozar una sonrisa confiada. Aceptó el apretón con firmeza, denotando tanto respeto como la determinación de una comandante que no tenía intención de ceder fácilmente.

Kebiko: Heh, no esperaba menos de ti. Peleemos bien, hermano.

Las estudiantes de Viking Fisheries reaccionaron con una mezcla de sorpresa y orgullo. Para ellas, este combate no era solo un enfrentamiento más, sino un duelo de honor entre guerreros de una misma herencia. Algunas sonrieron con emoción, mientras que otras asintieron con respeto hacia Erik y su tripulación.

—¡Vamos, chicas, demostremos de qué estamos hechas! —exclamó una de las tripulantes con entusiasmo, avivando el espíritu de sus compañeras.

El ambiente cambió por un instante. De la tensión previa se pasó a una sensación de hermandad guerrera, un entendimiento silencioso de que, sin importar el resultado, ambos equipos compartirían la gloria de una batalla bien luchada.

POV general

Las banderas de ambas academias ondeaban con orgullo mientras los equipos se dispersaban hacia sus respectivas posiciones. La zona de combate, una mezcla de colinas estratégicas, pantanos traicioneros y espesos bosques, ofrecía un escenario ideal para la guerra de maniobras y emboscadas en la que ambas academias se especializaban.

Desde las gradas y las áreas de observación, las cámaras proyectaban imágenes detalladas del enfrentamiento en pantallas gigantes, permitiendo a la audiencia seguir cada movimiento con precisión. La tensión en el aire era palpable.

—¡PANZER VOR! —exclamó el anunciante, marcando oficialmente el inicio del combate.

Las tomas aéreas mostraban la rápida dispersión de ambos equipos, cada uno ejecutando su estrategia con disciplina y coordinación.

En la zona de espectadores, la emoción se reflejaba en los rostros de las estudiantes de diversas academias. Jatkosota, Pravda y St. Gloriana observaban con gran interés, analizando cada táctica desplegada por su aliado, Carolus Rex. Sin embargo, no eran las únicas. Kuromorimine y Ooarai también estaban presentes, su atención dividida no solo por la batalla, sino por la tensión visible entre Maho y Miho.

Maho permanecía con los brazos cruzados, su expresión seria e impenetrable mientras sus ojos seguían cada movimiento en el campo de batalla. A su lado, Miho intentaba mantener la compostura, pero la incomodidad en su postura dejaba en claro que la situación era más personal para ella de lo que quería admitir. Su cambio de academia aún era un tema delicado, y el simple hecho de compartir el mismo espacio con su hermana mayor reavivaba aquella presión silenciosa.

A pesar de ello, el combate en curso exigía la atención de todas. Lo que estaba por suceder no solo definiría la victoria de un equipo, sino que también marcaría un enfrentamiento entre dos doctrinas similares, donde solo la mejor ejecución de estrategia definiría al vencedor.

El centurion de Erik subió a la colina más alta mientras llevaba consigo a algunos strv m/38 como escolta mientras los escuadrones de Astrid, Freya y Gudrun se movían a distintos puntos y ocultándose, llegando al punto de ensuciar sus tanques con barro y pegándoles algo de hierba para mejorar el camuflaje.

Erik sabía que de seguro Viking fisheries haría casi exactamente lo mismo, así que usó a los BT-42 recién fabricados como carnada, obligando a Viking fisheries a que salgan de sus escondites con acoso constante y de vez en cuando mandando ciertos tanques ligeros.

Erik: Subestimé lo tercas que son.

Recordando que en la wiki mencionaba que no importa lo que pase, seguirán su estrategia al pié de la letra, decidió utilizar lo mismo que dice que hizo Katyusha en contra de ellas.

Erik usa sus binoculares y observa que aun caigan los tanques de viking fisheries, ellas tratan de aferrarse a la emboscada a pesar de que Carolus rex también usa esa táctica.

Erik: ya no importa, destruyan todo, que los BT-42 se alejen

Para ganar, a veces hay que ceder un poco para que el frente avance un poco más.

Los BT-42 se van de la zona y pasa algo que nadie se imaginaba

FIIUUUUUU BOOOM

Las explosiones resonaban en todo el campo de batalla mientras el enfrentamiento alcanzaba su punto más crítico. La estrategia de Erik había funcionado a la perfección: Viking Fisheries, al verse forzado a abandonar sus posiciones de emboscada, quedó expuesto ante el contraataque de Carolus Rex.

Desde las gradas, la audiencia observaba con asombro el despliegue táctico sin precedentes. El uso de los BT-42 como artillería improvisada había sido un giro inesperado, rompiendo por completo las expectativas de quienes pensaban que Carolus Rex apostaría por una ofensiva directa.

Darjeeling, quien normalmente mantenía la compostura sin importar la situación, bajó su taza de té con sorpresa.

Darjeeling: ¿¡Los están usando como artillería?!

Las estudiantes de St. Gloriana a su alrededor intercambiaban miradas de asombro. Orange Pekoe, con los ojos bien abiertos, murmuró:

Pekoe: Eso no es algo que se vea todos los días...

Mientras tanto, en la sección de Pravda, Katyusha se puso de pie sobre los hombros de Nonna, señalando la pantalla con una mezcla de sorpresa y emoción.

Katyusha: ¡Oye, oye! ¡Nosotros también tenemos artillería! ¿Por qué no hacemos algo así?

Nonna, con su característica tranquilidad, respondió sin apartar la vista de la pantalla:

Nonna: Это не просто случайный непрямой огонь. Их расчёты должны быть предельно точными (Esto no es solo fuego indirecto al azar. Sus cálculos deben ser extremadamente precisos).

Klara, a su lado, asintió.

Klara: Это риск, но это работает для них (Es un riesgo, pero les está funcionando).

En la sección de Kuromorimine, Maho Nishizumi observaba con el ceño fruncido. No por desagrado, sino porque analizaba cada movimiento.

Maho: No solo están usando fuego indirecto... están obligando a su enemigo a romper formación.

Schwarz y el resto de las oficiales de Kuromorimine se miraron entre sí, dándose cuenta de la profundidad táctica de lo que estaban viendo.

Pero la tensión era aún mayor en la sección de Ooarai. Miho Nishizumi miraba la pantalla con una mezcla de orgullo y nerviosismo. En el fondo, sabía que enfrentarse a Erik en este torneo no sería nada fácil.

Saori, con la boca entreabierta, señaló la pantalla.

Saori: ¡Es realmente es aterrador cuando pelea en serio!

Hana, siempre serena, asintió.

Hana: Es una estrategia bien ejecutada. No está luchando de frente, sino que está usando cada elemento del terreno y la composición de su equipo a su favor.

Yukari, con una expresión emocionada, sacó una libreta y comenzó a tomar notas frenéticamente.

Yukari: ¡Es increíble! ¡Primero usa una táctica de hostigamiento para obligar al enemigo a moverse y luego los castiga con fuego de artillería improvisada! ¡Esto es algo que nunca se había visto en Sensha-dō!

En Saunders, Kay observaba con una gran sonrisa en el rostro.

Kay: ¡Jaja! ¡Vaya forma de pelear! Me gusta ese estilo agresivo.

Alisa, a su lado, tenía los brazos cruzados y miraba con una expresión preocupada.

Mientras tanto, en Anzio, Anchovy había dejado caer su plato de pasta al ver la estrategia de Erik.

Anchovy: ¡Mamma mia! ¡Nosotros también podríamos hacer algo así con nuestros semoventes!

Pepperoni y Carpaccio la miraron, pero ninguna de las dos sabía si eso era realmente posible para su equipo.

Todas las academias sabían que Carolus rex usaba ataques de largo alcance, pero subestimaron por mucho la distancia y están sorprendidas debido a la escena que está siendo vista, ya que uno a simple vista pensó que Erik se desesperaría y adoptaría una formación para avanzar, pero en su lugar decidió ordenar a que los BT-42 apunten hacia arriba al igual que otros tanques medianos para hacer la función de artillería.

Kuromorimine y Ooarai también miraban la escena con atención. Aunque ambas academias habían estudiado las tácticas de Carolus Rex, pocas veces habían presenciado su despliegue en un entorno tan similar al suyo. Maho Nishizumi frunció el ceño, reconociendo el nivel de disciplina y ejecución en la estrategia de Erik.

En el campo, las fuerzas de Carolus Rex no dieron tregua. Los tanques ligeros cazaban a los rezagados de Viking Fisheries como si fueran ratones atrapados en un laberinto sin salida. Los Strv m/38 servían como hostigadores, mientras los T-34-85 actuaban como la garra letal que remataba cualquier resistencia.

Gudrun: Toma eso!!! -grita con euforia mientras que su T-34-85 derrotaba otro S.35 y Pz III ausf J.

POV Erik

Luego de un tiempo cazando, encuentro el tanque insignia NbFz.

Erik: Tanque, distancia 2150 metros.

Menciono eso a la artillera mientras entro al tanque y cierro la escotilla.

Yrsa: Lo tengo en la mira -con tono adormilado y mascando algo de chicle.

Doy la orden de inmovilizarlo desde la radio y vuelvo a salir de la escotilla para mirar la situación y veo varios strv m/38 la rodean pero ese NbFz es muy escurridizo, así que los centurion deciden cerrar sus rutas de salida y comienzan a embestirlo mientras los más ligeros le destrozan las orugas.

Freya: Todo listo, comandante!! -dice desde la radio.

Yrsa: Lista para tirar -Con su dedo sobre el gatillo.

Erik: Fuego!!!

El sonido del disparo del Centurion resonó en el aire. El proyectil perforante voló a través del campo de batalla y alcanzó su objetivo con precisión quirúrgica, impactando la parte trasera del NbFz. En cuestión de segundos, el tanque insignia quedó fuera de combate.

De vuelta en el campo de batalla, el momento culminante llegó cuando el Centurion de Erik disparó contra el NbFz de Viking Fisheries.

El proyectil perforante voló a través del campo y se incrustó en la parte trasera del tanque insignia enemigo, dejándolo fuera de combate.

Hubo un breve silencio en las gradas, hasta que el comentarista anunció:

Presentadora: ¡Viking Fisheries ha perdido su tanque insignia! ¡Victoria para Carolus Rex!

La sección de Carolus Rex estalló en vítores, mientras en el resto de las academias se escuchaban murmullos y discusiones sobre lo que acababan de presenciar.

En la zona de Kuromorimine, Maho cerró los ojos por un momento y luego se cruzó de brazos.

Maho: Miho.

Su hermana menor la miró con atención.

Maho: Si quieres ganar este torneo… tendrás que enfrentarte a eso.

Miho tragó saliva. Sabía que Maho tenía razón. Y, en el fondo, se preguntaba cómo sería el momento en que tuviera que enfrentar a Erik en combate.

Mientras tanto en la sección de Jatkosota, donde las integrantes de la academia finlandesa observaban el desenlace de la batalla. A diferencia de otras academias que reaccionaban con sorpresa o emoción, la mayoría de las chicas de Jatkosota permanecían en silencio, analizando con calma cada movimiento de Carolus Rex.

Mika, siempre con su kantele en mano, rascó unas cuantas notas mientras sonreía de forma misteriosa.

Mika: Hmm… interesante. Muy interesante.

Mikko, con los brazos cruzados, frunció el ceño levemente.

Mikko: ¿De qué hablas? Lo que hicieron no es nada que no podríamos hacer nosotras con nuestros BT-42.

Mika ladeó la cabeza y la miró de reojo.

Mika: Quizás, pero dime, Mikko… ¿podrías hacer esos cálculos en medio del combate? ¿Con esa precisión?

Mikko abrió la boca para responder, pero se quedó callada. Sabía que apuntar con fuego indirecto era algo muy complicado y lo que había hecho Carolus Rex no era cuestión de suerte.

Aki, con una expresión seria, tomó la palabra.

Aki: Ellos no solo improvisaron. Sabían exactamente lo que hacían. Los BT-42 no son tan efectivos como artillería, pero lograron el efecto psicológico que necesitaban: obligar a Viking Fisheries a moverse.

Mika rió suavemente y comenzó a tocar otra melodía.

Mika: Exacto. No importa si las balas caen o no. Lo importante es hacer que el enemigo crea que caerán.

Su tripulación la miró con curiosidad, mientras Mika se ponía su gorra con un aire despreocupado.

Mika: Erik es un hombre interesante… —dijo con su característico tono enigmático—. Será divertido ver cómo sigue su camino en este torneo.

Las integrantes de Jatkosota asintieron, sin decir nada más. En sus mentes, ya estaban ideando cómo podrían enfrentarse a Carolus Rex en caso de que sus caminos se cruzaran.

Cuando el enfrentamiento terminó y las banderas blancas ondearon sobre los tanques inhabilitados de Viking Fisheries, la presentadora del torneo se acercó a Erik para una breve entrevista. Con una sonrisa profesional, sostuvo el micrófono y miró a la cámara antes de hablar.

Presentadora: ¡Qué combate tan impresionante! —exclamó con entusiasmo—. Carolus Rex ha demostrado un dominio excepcional del combate a larga distancia. Capitán Lindsworm, una pregunta que muchos deben estarse haciendo en este momento: ¿cómo es posible que sus artilleras logren tiros de tan largo alcance con tanta precisión?

Crucé los brazos con calma y procedí a explicar.

—Ponemos objetivos a ciertas distancias específicas y nuestras artilleras y comandantes deben calcular bien la distancia proporcionada, haciendo que se acostumbren a las distancias sin tener que depender tanto del telémetro. A veces, no hay visión efectiva, ya sea por el terreno, el clima o el humo en el campo de batalla. Por eso, entrenamos hasta que nuestros cálculos sean precisos incluso sin ayudas electrónicas.

Eso lo digo mas que nada porque en war thunder tuve que adaptarme a sacar mediciones a ojo, ya que tardaba mucho el telémetro en sacar la distancia, así que solo subía el cañón a la distancia que yo creía y disparaba, eso me sirvió luego de mucho tiempo entrenando al punto que podía destruir tanques desde distancias muy largas y eso me hacía ganar muchas partidas.

POV general

En la sección de Ooarai, la presidenta del consejo estudiantil, Anzu Kadotani, escuchó las palabras de Erik con una expresión pensativa.

Anzu: Hmm… eso suena útil —murmuró, masticando un camote seco—.

Momo Kawashima, su asistente, frunció el ceño mientras tomaba notas mentales.

Momo: Si entrenamos de esa manera, podríamos mejorar la precisión de nuestros disparos a larga distancia… —murmuró.

Yuzu Koyama, la otra integrante del consejo, ladeó la cabeza con curiosidad.

Yuzu: Aunque no tenemos tanques diseñados para combate a larga distancia como los de Carolus Rex…

Anzu: Pero podríamos adaptar la técnica —con una sonrisa astuta—. Me pregunto si Nishizumi tendrá en cuenta esta idea…

Las chicas de Ooarai intercambiaron miradas. No eran las únicas que consideraban la posibilidad. En las gradas, varias academias se mostraban pensativas, reflexionando sobre si podrían integrar un entrenamiento similar en sus propias estrategias.

Esto es solo el inicio para llegar a la cima.




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